martes, 15 de mayo de 2018

16/5 LA INDUSTRIA CULTURAL

La industria cultural


El concepto de industria cultural nace en un texto de Horkheimer y Adorno publicado en 1947, Dialéctica del Iluminismo. Refiere al conjunto de empresas que llevan a cabo la producción en serie, automatizada y estandarizada, de bienes culturales

Pero, ¿qué son los bienes culturales?

En todos los bienes ó productos, se pueden distinguir tres dimensiones de valor:


Los bienes culturales son aquellos en los que 
el valor simbólico predomina sobre los otros dos. 

Por ejemplo, el valor simbólico que la camiseta de fútbol puede tener para un hincha, es mucho más importante que su precio ó su utilidad. Lo mismo sucede con una entrada al cine, con un libro, una obra de arte ó un recital. Estas tres dimensiones del valor están presentes en todos los bienes pero, en los que llamamos "bienes culturales", la más importante es la que tiene que ver con los sentidos que se comparten socialmente.


Entonces dijimos que una industria cultural es aquella que produce bienes simbólicos.

Veamos la definición de la UNESCO:


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En la fotografía anterior, tenemos varios ejemplos de empresas que producen bienes de contenido cultural, artístico o patrimonial. ¿Pueden encontrar los seis ejemplos?

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Adorno y Horkheimer fueron muy críticos de la industria cultural, en particular de la producción cinematográfica. La acusaban de estandarizar la producción artística. Para ellos, todos los films de la industria cinematográfica "dicen lo mismo". Le atribuían el poder de generar espectadores pasivos. A diferencia de los libros, en el cine todo estaría dado de antemano por las imágenes; en este sentido, sostienen que no deja espacio para la fantasía, para la imaginación ni para la libertad de pensar individualmente.   


Otro de los críticos más importantes de la industria cultural fue Walter Benjamin.
Benjamin reconoce en ella un aspecto positivo, la democratización. La reproducción técnica de los bienes culturales a gran escala hace que dichos bienes estén accesibles para más personas; pero, al mismo tiempo, lo que se resigna es la experiencia directa del ver: se produce la pérdida del "aura".


Pensemos en el famoso cuadro de Leonardo Da Vinci, "La Gioconda". Si la industria cultural no hubiera reproducido este cuadro hasta el hartazgo en los diferentes medios, la obra sería desconocida para la mayoría de nosotros, puesto que la única manera de acceder a ella sería visitando el museo del Louvre de París, donde se exhibe.


Según Benjamin, con la producción en serie lo que estamos sacrificando es la "unicidad" de la obra de arte. La experiencia del ver ya no es directa (como en el museo), sino que es una experiencia estandarizada y la mediatizada. Se reduce a la repetición de una fórmula.

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¿Miren el video de la presentación de un capítulo de Los Simpson que  aspectos de la industria cultural aparecen criticados en este video?


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